Un Milán sin suerte ni gasolina
Una vez más la música de la Champions ha transformado el pequeño Milán de la liga en una princesa en Europa. Pero la carga psicológica ha durado solamente 45 minutos y no todo el partido como se hubiera deseado. Así el equipo de Seedorf se estaba ilusionando con la victoria hasta que la mala suerte ha cancelado los posibles goles de Kaká y Poli, estrellándolos en el larguero y en el poste. En la segunda parte la mala suerte ha parado también a Balotelli, que siempre es el más peligroso, y tuvo que salir del campo por un problema en el hombro. Más allá de la suerte, a este Milán le ha faltado gasolina, como ya se ha visto muchas veces esta temporada. En la segunda parte el Milán ha desaparecido poco a poco, dejando el campo al equipazo de Simeone, que pudo sentenciar no solamente el partido sino la eliminatoria en el final con el goleador de siempre, Diego Costa. Ahora tan solo un milagro podría permitir al equipo de Kaká pasar a los cuartos de final, pero la verdad es que nadie lo cree. La afición está deprimida porque el Atlético se ha confirmado como un equipo superior, así que tampoco la música de la Champions en el Calderón podrá despertar al Milán.