Concurso de canteras en Arona
Pues sí, si hay fútbol, y no sólo en la Premier. Digital+ y Cuatro nos muestran todo el día el campeonato internacional de fútbol 7, esa llama que mantienen encendida José Ramón de la Morena y Carmelo Zubiaur, entre otros. Aquello empezó con un campeonato nacional, en Brunete, y con el tiempo creció y se desdobló en dos, el nacional, en verano, y este internacional, en la eterna primavera canaria. Un concurso de canteras, donde vemos qué viene y cómo viene. Guarden en su memoria lo que vean, porque niños como estos ganaron el Mundial de Sudáfrica y sus eurocopas circundantes.
La cantera, ese capital. Tengo para mí que los clubes que la olvidan no sólo pierden su esencia, que a según quién le puede dar igual, sino que también pierden dinero. No hubo mayor disparate, entre todos los que hizo Jesús Gil, que cerrar durante un tiempo la cantera para ahorrar el chocolate del loro, dejando en la calle a unos cuantos, entre otros Raúl, que se acogió a la bandera madridista. Luego, reconstruida la cantera, miren lo que dieron primero y dejaron luego atrás Torres y De Gea. El Barça ha hecho de la cantera su excelencia y Florentino debe su reiterado fracaso al descuido de la misma.
No hace mucho hablaba yo con Amadeo Salvo, presidente del Valencia, que administra una situación difícil. Examinando con perspectiva los últimos años, había descubierto que el club había gastado 308 millones en fichajes de fuera, de los que había recuperado 108 con posteriores ventas. En ese mismo periodo, había obtenido 65 millones en ventas de canteranos (Albiol, Silva, Gavilán, Jordi Alba, Isco...). Se trata de tener el club en manos de intermediarios cómplices o de gente buena que haga de niños futbolistas. Gente como la que dirige esos equipos de niños de Arona...