El gol número 800 lo marcó Cristiano

El gol número 800 lo marcó Cristiano

El primer gol del Madrid en Copa de Europa lo marcó Miguel Muñoz, el número 100, Di Stéfano, el 200, Puskas... el 800, Cristiano ayer. Esa montaña de goles destaca al Madrid en esta competición, le eleva muy por encima de los 542 del Bayern de Múnich, que le sigue en esa tabla. Esta siempre fue la competición favorita del Madrid, sobre ella hizo su leyenda, y se diría que nunca termina el curso feliz si no la consigue. Hace tiempo que persigue la Décima. Este año puede ser. El Madrid ha cobrado un poderío impresionante y tiene el inagotable aporte de goles de Cristiano Ronaldo, ese genio.

Cristiano ha acabado con nueve goles la fase de grupo, cosa que nadie hizo antes. Y eso que mandó al limbo un penalti que le hicieron a él mismo. Pero un día más fue lo más afilado del ataque del Madrid (vi a Bale y Benzema un poco por debajo de sus últimas apariciones), la salida natural en el ataque del buen juego del equipo. Un juego que tejieron Xabi Alonso y Modric, a cuyo mando todos se mueven bien. Viendo las últimas actuaciones, qué lejos quedan ahora aquellos horribles partidos del Madrid en Vallecas o en Elche, donde se le veía un grupo desmedrado, confuso y sin rumbo.

Recordaba ayer en Carrusel una frase críptica que una vez me dijo Sacchi, ese místico: “Cuando mayor es el caos, más cerca está la solución.” No sé qué quería decir, pero ahora ha pasado. Claro que quizá en este caso todo el misterio sea Xabi Alonso, porque la rehabilitación del equipo ha coincidido, si no exactamente con su reaparición, sí con su puesta definitiva a punto. En torno a él se ha acomodado todo, primero con Khedira y el 4-3-3, ahora con el 4-2-3-1. Dadme un punto de apoyo y moveré la tierra, dijo Arquímedes, ¿no? Pues eso. El punto de apoyo es Xabi Alonso. Del caos a la solución.