Un equipo que acaba un ciclo

El 24 de mayo de 1989 el mejor Milán de la época de Silvio Berlusconi triunfaba en el Camp Nou ganando por 4-0 al Steaua su tercera Copa de Europa. Se trató de una noche histórica con 90.000 aficionados milanistas en las gradas, que hoy no reconocen el equipo que vuelve al mismo estadio para enfrentarse al Barça. Aquel Milán empezaba una época de oro, mientras que este Milán parece acabar un ciclo. En el fútbol puede pasar de todo y quizá el equipo de Allegri pueda repetir lo de la ida en San Siro o ganar.

Todo indica lo contrario, porque desde aquel 1-1, el Milán ha entrado en plena crisis, (derrotas con Parma y Fiorentina y un empate con el Lazio). El Milán está a 16 puntos del tercer puesto que vale la Champions y a tres de la zona de descenso. Balotelli suma seis tarjetas amarillas en la liga en siete partidos y sólo ha marcado tres goles. Como si no fuese suficiente ese panorama negro, Bárbara Berlusconi, la hija del presidente, ha abierto una dura polémica diciendo que hace falta un cambio de filosofía. El culpable, aunque ella lo haya desmentido, es Galliani, un gran directivo con 27 años de experiencia, que no merece este ataque. Una mala estrategia en el peor momento que deja entender que el gran Milán se está acabando.