Casillas-Buffon: dos grandes y dos destinos

Si Florentino hubiera logrado fichar a Buffon en 2004, es muy posible, por qué no, que Casillas hubiera terminado en la Juve. En tal caso, Ikerino y Buffon se hubieran encontrado con el mismo afecto que el pasado miércoles, pero en equipos distintos. Suerte que el destino es incontrolable, hasta para Florentino.

Sin embargo, aunque nunca se culminó el intercambio, los dos porteros han tenido carreras paralelas y a ratos entrelazadas. Buffon, ahora de 35 años, fue campeón mundial en 2006, a los 28. Casillas, de 32, levantó la Copa del Mundo en 2010, a los 29. La comparación de títulos termina aquí porque el italiano no ha ganado ni Eurocopa ni Champions.

Los reconocimientos individuales señalan el dominio y el cambio de poder de los guardametas más relevantes del siglo. Buffon fue declarado mejor portero del mundo en cuatro ocasiones, hasta que Casillas tomó el relevó y encadenó cinco nombramientos, el último en 2012. En diez temporadas, sólo Peter Cech (2005) se ha inmiscuido en su duelo personal.

Si bien el palmarés del madridista es más brillante, Iker (1,83) nunca ha podido recortar los ocho centímetros que le separan de su amigo Gigi (1,91). En esa distancia, y a falta de otros argumentos, se concentra la desconfianza de ciertos técnicos y algún presidente.

Desde esa perspectiva, las palabras de Buffon en la previa cobran otra vida: "Iker es más grande ahora". Seguro que Casillas le quiso agradecer el detalle. Seguro que su viejo colega resopló de alivio por no estar ahora mismo en el Madrid.