El Madrid de Ancelotti vive entre sustos

El Madrid de Ancelotti vive entre sustos

El Madrid vive en el alambre. Otra vez dos puntos (o mejor podríamos decir tres) en la ‘Zona Cesarini’, los minutos de descuento que los italianos dieron en llamar así por la exagerada facilidad de aquel jugador argentino así apellidado (Renato, para los amigos) para marcar a última hora. Con todo perdido (y ya sin Benzema en el campo, conviene precisar, pero con Jesé y Morata, para júbilo de Roncero) el Madrid desencadenó una tormenta que desencuadernó al Levante y se llevó el partido. Al Levante, sí, le quedó la satisfacción del deber cumplido. Eso no da puntos, pero es importante.

Porque hizo siempre lo que debía y podía, en un partido bien planificado por Caparrós y bien ejecutado por los suyos. Al Madrid le costó todo un mundo y sólo ante la desesperación reaccionó. Con el 1-0, Coentrao dejó el puesto a Marcelo y ahí se produjo una primera reacción, porque Marcelo mete un peligro en todas sus acciones que sin él no existe. Luego, con el 2-1, entraron sucesivamente Morata y Jesé por Isco y Benzema, y ahí se produjo la segunda reacción, sobre todo en el último cambio. Cómo será lo de Benzema que ya hasta le pitó la grada local cuando se retiraba. Esto sí que es nuevo.

Total, goles de Morata y gol de Cristiano ‘in extremis’, lo que espanta una nueva crisis y mantiene al Madrid en los raíles. En esta Liga que ya se gana con cien puntos conviene pensar que el total de los posibles es 114. Llevar perdidos cinco a estas alturas ya es ir por detrás del horario previsto. Y visto lo de Elche y lo de anoche, podrían ser más. El Madrid no pita, no tiene ni la energía del de hace dos años ni el juego que de Ancelotti se esperaba. Y no le dejan contraatacar. Rotan todos menos Cristiano y Benzema, pero el fútbol no aparece. Eso sí: el gol de Cristiano rara vez falta. Él justifica su permanencia. El otro...