Bale hoy y Casillas para el martes
Jugará Bale, jugará Illarramendi, jugará Nacho, jugará Casillas en Estambul ante el Galatasaray... y Benzema no se toca. Me gustan los entrenadores explícitos, los que salen a las conferencias de prensa para calmar la curiosidad de la afición, al menos en lo que pueden y en lo que tienen decidido. Y me gustan estas novedades. Dado que hay bajas en la media y que él ya se ha recuperado, Illarramendi puede por fin comparecer. Opacado por su lesión y por la polvareda levantada por Bale, la gente casi había perdido de vista este fichaje. Jugador carísimo, también. Pero bueno. Para él, el futuro empieza hoy.
Nacho, flamante internacional, aprovecha la doble baja en el lateral izquierdo. He ahí la ventaja de ser polivalente. Pero la tarta del día será Bale, que anda sin pretemporada, por lo que sólo jugará una parte, no sabemos si la primera o la segunda. Es un descomunal prodigio físico, lo mismo que Cristiano. Uno se imagina a cualquiera de los dos como medalla olímpica en decatlón, o poco menos. Por eso, por esa exultancia física, se atreve Ancelotti a sacarle ya, aunque sólo sea medio partido. Cuanto antes entre en el equipo, mejor. Con él habrá muchas cosas que ajustar y no hay que perder tiempo.
Y Casillas el martes. ¿Uno para la Liga y otro para la Champions? Esto es más raro que lo de la Copa, pero cada maestrillo tiene su librillo. Para Casillas es mejor esto que nada, y quién sabe lo que deparará el futuro. He aquí un asunto en el que Ancelotti ha confesado dudas, y en ellas sigue. Atrapado entre las recomendaciones de un diletante y la alarma social que ha provocado por seguir esas recomendaciones, ha optado por tirar por la calle de en medio. Ancelotti es dúctil, pero no es tonto. Eso sí: a cambio insiste con Benzema, que ya es suplente con Francia, la selección número diecinueve del mundo...