Froome mete caña en la crono

Chris Froome ha dado un salto gigantesco en la consolidación de su maillot amarillo del Tour de Francia, al meter un tiempo importante a sus principales rivales en la contrarreloj de 33 kilómetros entre Avranches y Mont Saint Michel. Previsible, por cierto. El británico de origen keniano no pudo alzarse con la victoria, que se llevó el campeón del mundo de la especialidad, el alemán Tony Martin. Pero en su principal ambición, la lucha por general, logró meter 2:00 minutos a Alejandro Valverde (queda a 3:25 en la general) y 2:03 a Contador (3:54).

En el Dauphiné, en una contrarreloj de distancia casi idéntica (32,5 km), Froome había propinado mordiscos preocupantes a Contador (2:44) y Valverde (2:54). Las diferencias se han amortiguado un poco en este Tour, pero son lo suficientemente significativas para que los dos españoles se tengan que plantear una estrategia muy ofensiva a partir del próximo domingo en el Mont Ventoux y, sobre todo, en los Alpes de la última semana. Siempre teniendo en cuenta que resta otra crono de 32 km (17ª etapa: Embrun-Chorges), aunque entonces estará aderezada con dos puertos de segunda categoría.



Chris Froome ya dio muestras de sus intenciones en el primer punto intermedio (km 9,5), donde marcó el mejor tiempo con 25 y 26 segundos de ventaja, respectivamente, respecto a Valverde y Contador. Un dato que no hacía presagiar nada bueno a los dos españoles, como se confirmó en el km 22 (1:26 al madrileño y 1:27 al murciano) y posteriormente en la meta.

Contador y Valverde fueron almas gemelas durante todo el recorrido, en el que marcaron cronos prácticamente calcados, con ligera ventaja final de 3 segundos para Valverde. En tiempo similares rodaron también Bauke Mollema (a 1:53 del lider), Roman Kreuziger (a 2:06) y Laurens Ten Dam (a 2:20). La puja por el podio se estrecha entre estos cinco corredores. Peor les fue la cosa a Nairo Quintana y Purito Rodríguez, también almas gemelas, pero a bastante más distancia: cedieron 3:16 y 3:17 respecto al maillot amarillo.

Mención aparte merece Tony Martin, que pasadas las 13:00 horas se sentó ya en la silla reservada para el mejor tiempo (36:29 minutos, a un promedio de 54,271 km/h) y ya no se movió de ahí hasta que tuvo que subir al podio como vencedor. Sólo Froome llegó a amenazar su crono, que superó por 1 y 2 segundos en los dos puntos intermedios, pero el keniano se vació en la última parte y no pudo redondear con la victoria.

(Mi crónica de la undécima etapa del Tour de Francia)

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