El Atlético, en un hoyo que él cavó
Falcao, Navas, Joaquín y Tino Costa ya se fueron. En breve pueden seguirles Isco, Negredo, Soldado y Beñat. Ese es el estado de la clase media-alta de nuestro fútbol. Un mercadillo montado sobre años de gestión irresponsable y amateur. Clubes ahogados por unas deudas que, al menos en el caso del Atleti, generaron los mismos que ahora se proclaman víctimas. No. El culpable de la resaca no es el alcohol, es quien sigue pidiendo copas como si no hubiera mañana pese al obvio y feo desenlace.
Ahora la LFP ha entendido lo que las ligas americanas siempre supieron: como con los niños, hay que poner límites a la capacidad de destrucción de los dueños para evitar que se hagan daño solos. Economía responsable, prohibir que se gaste lo que no se tiene. Aunque duela, y dolerá, será para bien si ayuda a recuperar la igualdad. Se puede. Desde el año 2000, la NFL ha tenido nueve campeones y otros ocho disputaron la Super Bowl. En la NBA, seis ganadores y siete finalistas. Funciona, pues, claro que allí todos juegan con las mismas cartas. Aquí no. Si unos ahorran mientras el Barça ficha a Neymar y el Madrid a Bale, la cirugía radical sólo será mal maquillaje.