Afirma Raikkonen que no existen razones para sorprenderse por el rendimiento que tanto él como su escudería, Lotus, están exhibiendo en el arranque de temporada. Es razonable que lo vea así, conoce el trabajo que hay detrás de esos resultados y, además, debe confiar en el potencial de su proyecto como principio básico de la búsqueda del éxito. Yo podría decir también que esperaba ver al finlandés tan arriba, sería lo fácil… pero no lo honesto por mi parte. Las bondades del Lotus son evidentes y el talento de Kimi tampoco admite discusión, pero personalmente pensaba que lo suyo serían fogonazos de genialidad ajenos a la solvencia que debe demostrar un binomio con aspiraciones al título.

Creía, por concretar, que Red Bull, Ferrari, McLaren e incluso Mercedes estarían con regularidad por delante de Raikkonen, cuando no está siendo así. Además de rápido, Kimi y su coche están demostrando cuán importante es la gestión de los neumáticos en esta Fórmula 1 moderna y gracias a su eficacia en la tarea ponen en un compromiso a los que parecían favoritos claros en 2013. Yo sigo opinando que tarde o temprano Raikkonen perderá el ritmo de Vettel y Alonso, aunque admito que las posibilidades de error en mi pronóstico, visto lo visto hasta ahora, son elevadas. De momento es ya una excelente noticia tener a un tercero en discordia y con ese talante tan particular de Kimi, porque si el diálogo a dos bandas debe de producirse, mejor para el espectáculo que sea en la fase final del campeonato. Y si entonces no son dos sino que siguen siendo tres los aspirantes, mi sorpresa será todavía mayor…