Sobre Tito Vilanova, el dedo y el camino

Sobre Tito Vilanova, el dedo y el camino

Hace no mucho escribía yo aquí, medio en broma medio en serio, que estaba próxima la Liga en la que el Barça y el Madrid ganaran a todos los demás y se lo jugaran entre ellos. Bueno, pues el Barça ya está en esas. El Madrid se ha perdido por no se sabe qué 'lungas' razones, pero el Barça ha ganado a todo el mundo menos al Madrid, con el que empató (2-2 y con una defensa remendadísima, dicho sea de paso). Anoche cerró su preciosa primera vuelta en Málaga, ante uno de los buenos equipos del campeonato. Termina la primera vuelta con 55 puntos, todos menos dos. Lo nunca visto.

Curioso: al marcharse Guardiola los pronósticos generales (también el mío) se inclinaban por algún grado de descenso del modelo de excelencia del Barça. Sin embargo, ha sido al revés. El que ha bajado, y mucho, ha sido el Madrid que, con los mismos jugadores y el mismo entrenador de la marcha arrolladora del curso anterior, se desploma a ojos vistas. El Madrid ya no cuenta para la Liga. ¿Cuenta el Atlético, a 11 puntos? Razonablemente, no. Por primera vez que recuerde, el título está decidido en la primera vuelta. Con Tito. "Tu dedo señala nuestro camino", ¿recuerdan? ¡Qué sarcasmo contemplado ahora!

Lo que se discute ya es el territorio posterior, y ahí es donde el Madrid se mueve ahora, a siete puntos del segundo, el Atlético, que ha hecho una primera vuelta que en otros tiempos le hubiera permitido ser líder. Escapado el Barça, recuperaremos la vieja rivalidad madrileña. Porque ahora a quien persigue el Madrid es al Atlético, mientras a su vez es perseguido por ese Betis que está a tres puntos, y remontando. La segunda vuelta va a tener miga, porque cuesta imaginar al Madrid cuarto pero, ¿quién lo imaginaba a 18 del Barça y a 7 del Atleti? Aunque el Barça se haya ido, quedan emociones por vivir...