Los 88 (y...) de Messi y los 107 de Chitalu

Los 88 (y...) de Messi y los 107 de Chitalu

Cuando el otro día me vino Roncero con el descubrimiento de que en Zambia, hace cuarenta años, un jugador había alcanzado 107 goles entre enero y diciembre de 1972, lo primero que hice fue advertirle: "Vas a picar a Messi con eso; el año que viene es capaz de hacer 108 y la culpa será tuya". Pero veo que no todo el mundo ha tomado el asunto con el mismo talante. En el entorno del Barça ha molestado, se ha tomado como una urdimbre para desprestigiar a Messi. Y por lo que veo ha tenido una consecuencia: la FIFA ya ha anunciado que no homologará el récord del argentino.

Empiezo por el final: la explicación casi sobra. La FIFA no está para homologar récords nacidos de las cuentas que echamos los aficionados, ya que no de otra cosa se trata, sino para otras cosas más formales. En todo caso, las marcas están ahí y es bonito conversar sobre ellas. Por supuesto que 88 goles (más alguno que todavía caerá) en las competiciones de la España y la Europa de hoy, y en el marco de los partidos que juega Argentina, suponen algo distinto que 107 en la Zambia y el África de 1972. Nadie niega eso. El objetivo de Messi era Torpedo Müller y lo ha batido ampliamente.

Pero me ha gustado resucitar a Chitalu (literalmente, murió en accidente aéreo, cuando, ya seleccionador, el avión del equipo nacional de Zambia cayó en el agua) porque era una figura olvidada por el imaginario futbolístico y tiene un valor. Y me gusta que aparezcan nuevos desafíos ante Messi, porque le creo capaz de batirlos todos. El promedio de Torpedo Müller fue mejor, ahí tiene uno; y los 107 son una frontera tremenda, pero Messi aún va a más y no sabemos dónde parará. Y en todo caso, el fútbol está para estas cosas: para discusiones inofensivas, pasar el rato y que nadie se enfade.