Hasta Mou se rinde

Mal vamos.Un Betis entusiasta pero con poco fútbol, aunque con un Beñat imperial, se bastó para echar sal gorda en la úlcera sangrante que el Madrid sufre desde que empezó esta temporada horribilis. Quise esperar a la comparecencia de prensa de Mourinho antes de ponerme a darle a la tecla. Triple sorpresa: primero, al decidir el portugués aliviar el discurso arbitral a pesar del gol legal anulado a Benzema y del penalti escamoteado en el último segundo. Por menos, he visto a Mou lanzar tantos ¿por qués? como piedras tiene el Acueducto de Segovia. Después utilizó el ejemplo del tenista checo Stepanek para insinuar, como ya hiciese tras perder en Getafe y Sevilla, que sus jugadores no tienen el entusiasmo que se presupone en deportistas con su vigor físico y su envidiable edad. O sea, que tenemos de nuevo distanciamiento con la plantilla. Y terminó el pim pam pum confirmando lo que ya les anunciaba AS en su portada del jueves. Mourinho quiere un Hierro en su vida para no desgastarse solo en las batallas institucionales. "Ya se sabe aquí. Cuando ganamos, ganamos todos. Cuando perdemos, pierde el entrenador...". Ahora entiendo la cara amargada que tenía el día de la entrega de los Audis. Mou se siente solo y se ve como un incomprendido que sólo encuentra consuelo en su espartano equipo de trabajo y en el jardinero del Bernabéu. Míster, aunque puedas tener razón en alguna de tus quejas (lo de Hierro debió hacerse hace mucho tiempo), estás equivocando el camino. En el Madrid sólo vale trabajar y mirar hacia adelante. No hay pasado. Casi no hay presente. Y el futuro lo debes escribir tú para recuperar la esperanza perdida. ¿O es que tú no te ves ya incluido en la foto de ese futuro?

Clavo Ardiendo. Si Mourinho estuviese más receptivo y no viese a los periodistas como una recua de fiscales sin sentimientos, le contaría lo que pasó en 2007 con aquella Liga del Clavo Ardiendo. Le explicaría que en el Madrid hay un orgullo irracional que permite creer en lo imposible. Le diría que hay que dejarse de lamentos y ganar los próximos diez partidos en plan taladradora. Le obligaría a acompañarme para hacer los dos en solitario el Tour del Bernabéu. Así se empaparía de ese sentimiento que convierte a este club en la principal referencia futbolística del mundo. Eso sí, si te quedas contemplando el vídeo de anoche en el Villamarín te deprimes, te desesperas...

Beñat & Modric.El vasco podría haber venido por 10 kilos en verano. Al final llegó Modric por el triple. Cazorla hubiese costado la mitad que el croata. Silva pudo ser blanco hace tres veranos por cinco millones menos de lo que costó Coentrao. Morata se quedó inédito ayer y a cambio vimos a Kaká exhibir tan buena voluntad como impotencia en su imparable declive futbolístico. ¿Dónde está la españolización? ¿Dónde está el cuidado de la cantera?

El árbitro.Que al Madrid le perjudicase Jesús Gil, así se llama el joven árbitro extremeño, hubiese dado para diez crónicas de Villaratos en la semana de Rocchi. Pero como Mou dice que el Betis ganó justamente, me guardo mi enfado y me retiro a mis cuarteles. Si The Special One empieza a mostrarse abatido y sin brío, mal vamos. Sin embargo, mi admirado Pepe Mel vivió el partido con la intensidad de un ejército de samurais. Sólo me levantan los ánimos mis vikingos de la Peña Antolín Muñoz 'El Guapo' de Medina de las Torres (Badajoz). Está bien, chicos. ¡Yo no me rindo!