Tres millones de dólares tienen la culpa: España juega hoy en Panamá, a 33º y con una humedad del 75 %. Será a las 22:30, hora nuestra, y televisado por La 1 salvo que la huelga lo impida, que no es lo que se pensaba en la víspera. Lo que huelga, en todo caso, es el partido en sí, al menos desde el punto de vista de los clubes, que ven a sus jugadores acumular fatiga y no huelen nada de lo recaudado. En el grupo van ocho del Barça y tres del Madrid. Asusta pensar lo que diría Mourinho en caso contrario. Y van de varios otros equipos también, sí, que no me olvido. Para todos los clubes es la misma faena.

Del Bosque defiende estos partidos como una forma de 'hacer patria'. "Si nos llaman de estos países, ¿cómo decir que no?", me porfiaba un día. Es correcto desde su punto de vista, pero a esos futbolistas les pagan unos clubes que preferirían tenerlos descansados o, en todo caso, ser ellos mismos los que montaran amistosos recaudatorios que les ayudaran a hacer frente a tan cuantiosas fichas. En fin, la vieja discusión. Al menos, Del Bosque ha sido sensible y ha dado algunos descansos necesarios, los de Xavi y Xabi singularmente. Piqué y Puyol, otros dos ilustres, están aún en la salida de sendas lesiones.

Con ellos más Torres y Silva nos faltan varios de los principalísimos. Pero quedan otros: Casillas, Iniesta, Sergio Ramos, Busquets, Cesc, Pedrito, Cazorla... y Villa. Al asturiano le está dando mala vida Messi, así que le vendrá bien un partido grato con su otro equipo. También me gustará ver a Beñat y espero con interés el posible debut de Montoya. De Panamá, país de béisbol y boxeo, nos llega la palabra amiga de Dely Valdés y la evocación de Rommel Fernández, aquel buen tipo. Panamá tiene a mano ir por primera vez a un Mundial. Espero que en este partido sí tengan buen aspecto las gradas.