La valentía casi tuvo premio
La valentía de Paco en el Calderón estuvo a punto de recibir premio. Sólo le faltó que Leo hubiese acertado con la portería en lugar de encontrar el larguero en un remate de cabeza y que no hubiese cometido tantos errores anteriormente. El pasillo que hizo el equipo vallecano al supercampeón de Europa no fue el único que realizó porque el Atlético supo explotar el que dejó en los laterales con la defensa de tres. Tres de los cuatro goles rojiblancos parecieron fotocopias: penetración por la banda, pase atrás y gol.
Pero ni aún así cambió el Rayo su filosofía. Y eso le dio la oportunidad de que su afición le jalease con el cántico de "remontada, remontada", cuando pasó del 4-0 al 4-3 con los jugadores atléticos perdiendo tiempo y sus seguidores silbando cada vez que un futbolista del Rayo tenía la posesión de balón, no fuese a ser que la previsión se cumpliese. Las entradas de Lass, Delibasic y Chori Domínguez fueron decisivas en el canto del cisne rayista. El guineano se pegó a la cal y explotó su velocidad sin abusar de individualismos. El argentino dio movilidad y profundidad al ataque vallecano y el montenegrino se reivindicó haciendo dos goles. Cuatro, ha marcado el ariete esta semana, ya que el martes hizo otro doblete con su selección.