Cristiano Fútbol Club
Los postes, como todo en la vida, son algo relativo. Para Cristiano Ronaldo son enemigos; para Cech, aliados. Cristiano lleva tres goles, que serían siete si los palos hubieran mostrado algo de complicidad ante Holanda y Chequia. Ayer Cristiano estaba inquieto. Al cuarto de hora ordenó a Nani cambiarse de banda, buscando desequilibrar a Limbersky, más lento que Gebre Selaisse. El primer lanzamiento al palo lo asumió bien. Y tras el descanso pasó la mano por la calva de Webb buscando suerte. Pero ni así. El segundo poste desató su ansiedad. Comenzó, como dicen los argentinos, a brazaletear. Hasta que madrugó en un centro de Moutinho y batió a Cech. Figo se abrazó a Eusebio en el palco.
Portugal está en semifinales de la Eurocopa. Opalenica es el epicentro de Ronaldolandia. El Cristiano Fútbol Club espera a su próxima víctima y Mourinho estará en Donestk. Veremos si España también.