La obra inacabada del chileno
Nunca sabremos si la segunda temporada de Manuel Pellegrini era la buena porque el Real Madrid decidió no respetar su contrato. Su primera temporada fue un fiasco total en Champions y Copa, pero realizó una gran Liga BBVA, a pesar de no ganarla y de algunos imponderables: la durísima crítica a la que está sometido todo técnico del Real Madrid y el ninguneo al que le sometió Florentino Pérez, desde que se le ocurrió decir que quería quedarse con Robben y Sneijder. En aquel Madrid, que parece lejano, el entrenador era lo de menos.
En el Málaga, con más irregularidad de la habitual y la friolera de 30 puntos de distancia con el Madrid del segundo año de Mou, tiene al equipo en puestos de Champions y luchando por el tercer puesto, que es lo máximo a lo que seguramente puede aspirar. Además le favorece el hecho de estar centrado en una sola competición. Pellegrini no le admite comparación a Mou, que lo ha ganado casi todo en los equipos que ha militado y que triplica su salario, pero no es justo dejarle como un mal recuerdo en la retina del madridismo. No ganó títulos, es cierto, pero su obra quedó inacabada.