El Málaga tiene dos jugadores glamourosos y que son actualidad en estos momentos. Uno es el francés Jérémy Toulalan. Futbolista estelar, galáctico y comprometido. Partido a partido está demostrando su clase y su compromiso con el club. Su posición en el campo es de las más comprometidas y él solo se basta para correr y tapar los huecos de los demás. Y encima se permite marcar goles. Es una eminencia futbolística sin recambio ahora mismo en el once titular. El técnico Manuel Pellegrini tendrá un grave problema para ocupar su lugar en Anoeta el domingo contra la Real Sociedad. En un principio, su compañero Ignacio Camacho podría ser el sustituto natural, aunque no es que confíe mucho en él.

Y otro es Duda. El pasado partido contra el Villarreal se escucharon algunos pitos cuando tocaba el balón. No es justo que el portugués sea cuestionado cuando lo ha dado todo por el club y el equipo en anteriores situaciones catastróficas. La gente no tiene memoria, y con los de casa, porque éste es de aquí, diversos sectores no se están comportando demasiado bien. Duda está jugando en una posición que no es la suya y aun así, cumple. Yo sí soy de Duda. El Málaga es un sentimiento. Volveré.