El secreto es su cabeza

Con el Pipa Higuaín, poner medallas es muy fácil, su gol ante el Rayo Vallecano indicaba que el argentino volvía a sentirse en plenitud y el hat-trick en Cornellà lo refrenda. Una operación de hernia discal es fastidiada, y sólo un tipo que se tiene tanta fe como el Pipita es capaz de volver como un torbellino. Goles de primera, con arranque explosivo y sin dudar delante del portero. Higuaín ha mejorado porque se lo ha currado. Nadie le ha regalado nada, más bien todo lo contrario...

Si no hubiera tenido mentalidad de hierro, el Madrid le habría devorado hace ya varias temporadas, pero ha sabido despejar las dudas que hubiera a golazo limpio. Su competencia con Benzema sólo puede ser positiva para Mou y para el Madrid. Si el francés acepta el reto, crecerá como futbolista porque Higuaín no le va a dejar ni respirar. Si Özil tuviera los mismos arrestos que el argentino, no se vendría abajo con la vuelta de Kaká. El secreto del Pipa está en su cabeza.