La imagen del Madrid no se regala

No estoy de acuerdo con Piqué. Mourinho no está destrozando el fútbol español, lo prestigia porque es uno de los mejores técnicos del mundo. Pero el prestigio que se ha ganado en una carrera donde nadie le ha regalado nada lo tira con gestos como el del dedito en el ojo de Vilanova. Porque no todo vale con tal de ganar, ni siquiera en época de sequía. Todos nos equivocamos, pero él tuvo la oportunidad de rectificar y la desperdició ninguneando con ironía barata al segundo de Pep. El portugués es un enamorado de los trofeos y si se da una vuelta por el Museo del Bernabéu se dará cuenta de que en el Madrid títulos sobran. Se caen de las vitrinas. Lo que nunca sobra es la imagen de club señor que el Madrid se ha ganado a lo largo de su historia y que el portugués está dañando con gestos como el del otro día.

No fue el único que perdió los papeles. Sobraron los desaires de Villa, Pinto y Messi hacia el banquillo blanco en momentos de tensión máxima, pero la macarrada de Mou deja todo lo demás en segundo plano. Incluso el buen partido del Madrid. Nadie en el Bernabéu le va a dar un toque porque, como dijo Guardiola, es el "puto amo" del club, pero confío en la inteligencia del portugués para darse cuenta de que tiene que rectificar antes de que sea tarde. El Madrid puede ganar siempre, pero la imagen es difícil de restañar. Y Mourinho tarde o temprano se marchará...