La trilateral Benzema, Özil, Cristiano

Siete partidos, siete victorias, veintisiete goles a favor, cinco en contra. En tres continentes, hay que recordarlo. No todos los partidos han sido en China. El Madrid cierra una pretemporada brillante, que ayer Mourinho definió bien: una primera parte en América para desarrollar el trabajo deportivo y una última en China 'para defender el prestigio del club'. Y ahí, en China (la gran nación que viene, que se permite el lujo de chorrear públicamente a los Estados Unidos) los jugadores han echado el resto para quedar bien. Ahí hemos visto a los Galácticos resbalar alguna vez en gira de este tipo.

Se viaja para hacer dinero, pero sobre todo se viaja para hacer prestigio, y cuantos más goles, mejor, porque cuando uno de estos equipos (hablo del Madrid o el Barça) va por ahí, la gente espera ver algo extraordinario y hay que devolver el precio de la entrada y dejar buen recuerdo. El Madrid lo ha hecho, con dos nuevos goles de Benzema, que junto a Özil y Cristiano está formando una trilateral exquisita. Higuaín, el fajador del área, tendrá que remar otra vez río arriba. Esta vez a Benzema no le defiende el favoritismo de su presidente, sino su propio juego, sus goles. Habrá una competencia feroz por el puesto.

Esa trilateral, el elevado rendimiento de Coentrao y Callejón en cualquier lugar del planeta y del campo y el entusiasmo general por cumplir han sido las buenas notas del Madrid. La pequeña decepción ha sido no ver a Sahin, que según se curó de la rodilla que traía mal se lesionó de la que traía bien. Así que por algunas semanas más el Madrid seguirá dependiendo exclusivamente de Xabi Alonso para la armazón de juego. Y la decepción no tan pequeña ha sido Kaká, al que se le ha visto en cada partido bastante por debajo de la nota media. Lástima. Con vacaciones y curado este debía ser su año por fin, pero...