Refuerzos para un gran cambio
El Sporting afronta el tramo final de la Liga con el convencimiento de que la permanencia está al alcance de la mano. Con la visita al Real Madrid se terminarán los rivales complicados, después de haber sumado puntos ante otros también problemáticos a la hora de frenarlos, como fueron el Barcelona, el Valencia y el Villarreal. La imagen del equipo de Preciado en lo que va de segunda vuelta es diametralmente opuesta a la que se vio antes de que Nacho Cases diera el salto a la primera plantilla y se produjera la llegada del lusitano André Castro. Con ambos jugadores cambiaron las ideas del equipo de una forma espectacular. El Sporting tiene ahora un fútbol más dinámico, ágil y rápido, su juego resulta más vistoso y, sobre todo, es más efectivo.
Resulta extraño que Nacho Cases, que cumplía su quinta temporada en el filial, no hubiera sido llamado con alguna frecuencia por Preciado a los entrenamientos del primer equipo. También que podía haber sido baja si Landeira llega a aceptar quedarse en la segunda plantilla, allá por el mes de junio. El fútbol, a veces, tiene casualidades. Así surgió también el invento de Lora como lateral derecho. Lo que queda es que los jugadores están ahí, con un notable rendimiento en su bautismo en el fútbol profesional. Ahora, la ilusión de los dos chavales es estrenase en el Santiago Bernabéu. Ni Nacho Cases, ni André Castro saben aún lo que es jugar en un campo de este nivel. Es el siguiente paso en el sueño que viven en el Sporting, donde son la base del mejor cambio.