Aumenta el morbo en MotoGP

Además de un grandísimo piloto, Rossi es astuto como pocos. No da puntada sin hilo y cuando se despacha como lo ha hecho con Lorenzo, algún fin puede perseguir con sus palabras. Le considero un auténtico maestro de la estrategia y de la guerra psicológica. En mi opinión, fulminó las ambiciones de Sete Gibernau en aquella famosa última curva de Jerez 2005. Y ha pretendido hacer algo similar, usando variadas artimañas, con el mallorquín, con la diferencia de que en este caso le ha salido rana y su rival directo es ya el nuevo campeón de MotoGP.

Sus últimas declaraciones aumentan el morbo para la temporada que está a punto de arrancar. Sigo pensando que la situación de El Doctor es ahora bien diferente, ha perdido algunos de sus privilegios (que no el talento, por supuesto) y puede que descubramos a un piloto incluso más agresivo, dentro y fuera de la pista. Decir que Lorenzo cae mal a todo el mundo es, además de falso, muy poco acertado. Pero supongo que tampoco le importaría que sus palabras desestabilizaran de algún modo al español. Aunque no creo que lo consiga así que tendrá que ganarle subido en la Ducati, no desde un plató de televisión.