Momento menos complicado
El último triunfo ante el Hércules revitalizó la minada moral que tenía el Sporting. Sin embargo, en el vestuario se asume el efecto con los pies en el suelo, conscientes de que se ganó un partido, pero en la clasificación, el equipo comparte posición de descenso, que libra por cinco goles de diferencia. La planificación del partido parece la correcta, con la intención de repetir una intensidad máxima y una concentración total, ante un rival que llega con dos bajas importantes, como son Agüero y Reyes, además de tener el lastre del cansancio y la tensión del derbi.
Sin embargo, estos aspectos no se valoran en el vestuario de Mareo, donde se habla de la visita de un rival que tiene potencial de Champions.La posición del Sporting también se ve engañosa, porque el equipo es mejor de lo que indica el puesto 17, pero es la realidad, que obliga a sumar puntos para escapar de la quema. El Atlético es un rival de los más complicados, pero difícilmente será más accesible en otra época del calendario. De todas formas, el peor rival del Sporting es el propio Sporting. Si los de Preciado mantienen el tono de agresividad, y no caen en despistes de juveniles, tendrán opciones a sumar ante el Atlético.