Los nuevos Higuaín y Abreu del Apertura

Funes Mori. Nació en Mendoza, creció en EE UU, ganó un reality show, se probó en el Chelsea y hoy, a los 19 años y sin haberse formado en ninguna cantera, es una de las sensaciones del fútbol argentino. Se llama Rogelio Gabriel, tiene un mellizo que también juega en River y aparenta más que Gonzalo Higuaín cuando el Pipita apareció en la Primera.

Viatri. Se hizo de abajo. Fue acusado de robar una peluquería. Es goleador con movimientos técnicos de Riquelme. Cabecea y patea muy bien. Creció a la sombra del ya mítico e increíble Palermo y en el Apertura tiene el doble de goles que el Loco. Se llama Lucas y a los 23 años, recién ahora le toca ser un indiscutido en Boca Juniors.

Balsas. Nació en Montevideo, por necesidad se fue a vivir a España con su familia, volvió a su país, se transformó en jugador y Ramón Díaz (antiguo gran nueve y hoy gran entrenador) lo pidió para San Lorenzo. Se llama Sebastián, es una torre de 1,97 metros (arriba en la foto), 24 años, y movimientos lógicamente robóticos que redundan en un peligro constante.

Ramírez. Ya tiene 29 años y se sale del molde de promesa goleadora. Jugó en clubes de por acá y por allá (Ponferradina, por poner un ejemplo). Zurdo, puro concepto, se llama David y es otra de las figuras, y hace goles, del torneo Apertura argentino en un Godoy Cruz de Mendoza que ya no sorprende a nadie: es una grata realidad.