No va a ser una carrera nada fácil

Visto lo visto hasta ahora, vamos a presenciar un Tour muy complicado para Alberto Contador. No le va a resultar nada fácil desbancar a Andy Schleck. Ambos son los mejores escaladores del planeta, pero el año pasado las diferencias que consiguió el madrileño sobre el luxemburgués en la montaña no superaron el minuto y medio. Ahora, Andy saca a Alberto 41 segundos y cuenta con la ventaja de ser el primero que ha golpeado en dos etapas clave: en la jornada del pavés y en el primer final en alto, en Morzine-Avoriaz, donde nuestro ciclista no estuvo bien y no pudo seguirle.

Creo que la carrera se va a decidir en la contrarreloj de Burdeos. Son más de 50 kilómetros y ahí Contador cuenta con ventaja. Veo a Schleck de amarillo ese día y, pese a no ser un especialista, tendrá de su lado la fuerza que te da el maillot. Ya lo vimos con Carlos Sastre, que aguantó el empuje de Cadel Evans. El australiano será otro rival a vigilar. El Tour se presenta este año más difícil, pero también más emocionante.