El fútbol en tiempo de tarzanes
Gracias. Si lo que jugó España contra Alemania no es el fútbol, que alguien nos diga dónde está el bendito fútbol. Ser valiente no es pegar una patada, trabar una pelota o mirar feo a un rival. Ser valiente es hacer lo que intenta (y hace) esta selección española en cualquier cancha del mundo. Algunas veces pasa, y ésta lo fue, que el 1-0 es una goleada.
Bravo. En América, a Puyol se lo conoce como Tarzán. En este caso, es un Tarzán en tierra de galanes. Y también son tarzanes Xavi, Iniesta, Xabi Alonso, Villa y cualquiera que se contagie del pase al compañero. La esencia de este juego que muchos tecnócratas buscan dinamitar con ideas y planes absurdos. Bienvenidos los Puyol, pero más bienvenidos aún los tarzanes de la pelota.
Brújula. Maradona había dicho que Verón debía ser el Xavi celeste y blanco para ayudar, contener y potenciar a Messi. Verón ni siquiera entró un minuto contra Alemania en una paradoja más en esa gran paradoja que es Maradona. Hoy, toda la Argentina discute la continuidad de su Dios futbolero y casi toda disfruta de España.
Naranjas. Se viene una gran final. Fútbol contra fútbol. Y Robben y Sneijder con íntimos deseos de seguir demostrando que un tal Florentino y otro tal Manuel hicieron muy mal en dejarlos partir hace ahora un año. El fútbol siempre te ofrece revancha.