Brasil, hecho para jugar a la contra
Con un equipo diseñado para jugar al contraataque, Brasil inicia el martes ante Corea del Norte su andadura para intentar lograr su sexto título mundial. Se echan de menos jugadores más creativos en el centro del campo que facilitarían que la canarinha tuviera más el balón, pero Dunga se ha decantado por la fuerza física, acumulación de jugadores y disciplina táctica en ese sector del terreno de juego.
Al hacer una línea con Gilberto Silva, Felipe Melo y Elano muy próxima a los hombres de atrás, Brasil evita que se produzcan combinaciones y pases interiores de los equipos rivales que les puedan traer complicaciones. Además se limitan situaciones de uno contra uno ante los defensores que podrían ser letales. Principalmente Felipe Melo tendrá que trabajar mucho para cubrir el sector izquierdo, ya que la debilidad defensiva de Bastos es evidente. Maicon, Lucio y Juan ya juegan así en la liga italiana y esas ayudas les facilitan mucho el trabajo. Julio César también participa en este entramado defensivo colocando a sus compañeros en todo momento.
En ataque Brasil tiene poca fluidez pero es muy vertical. Maicon se incorpora con mucha fuerza por la banda derecha y los centros de Elano a balón parado para Lucio y Juan son muy precisos y siempre crean peligro. Pero el talento de sus hombres de arriba es su principal baza. Kaká, el líder del equipo, tendrá muchos metros para sus arrancadas, Robinho aportará movilidad y regate y Luis Fabiano, que jugará de espaldas a portería en muchas ocasiones, es la esperanza de goles.