Van Nistelrooy merece un cálido aplauso

Van Nistelrooy merece un cálido aplauso

Ya saben que me gusta sobre todo el fútbol de cantera, de la cantera propia se entiende, porque de cantera son todos, de un sitio o de otro. Me gusta el fútbol de cantera porque da soluciones mejores, pero no dejo de valorar a los que llegan de fuera y cumplen, cubriendo huecos en determinado puesto y en determinado momento de la historia. Hay jugadores que van y vienen, que quizá duren poco, pero que dejan un sello. Por su eficacia, por su honradez, por su encanto, por lo que sea. Ese es el caso de Van Nistelrooy, que se va hoy, después de sólo tres temporadas y media, pero con la soldada bien ganada.

Vino con unos cuantos goles y se va con más. Vino con unas cuantas cicatrices y se va con más. Una lesión le apartó del equipo y ahora ve difícil competir con Higuaín y Benzema por un puesto que necesita, porque sólo estando bien y activo podrá ir al Mundial. Ha escogido el Hamburgo, equipo cuya personalidad definió para los restos uno de los delanteros centros mejores que ha habido, Uwe Seeler. Buen destino, pues. Esta noche, antes del partido contra el Málaga, saldrá a saludar. Fino detalle de Florentino, superador de un 'guerracivilismo' estéril que enfrenta a los fichajes de Calderón con los de ahora.

Van Nistelrooy deja 64 goles, con un promedio goleador que mejora al del mismo Ronaldo. Sólo le superan Puskas, Pahiño, Di Stéfano y Hugo Sánchez en ese aspecto. Su conducta intachable provocó la importación casi masiva de holandeses, en la idea de que su ética del trabajo sería común a todos, cosa que no resultó exacta. Su figura me recuerda en cierto modo a las de Kopa, Muller, Jankovic, Illgner y alguno más, que no estuvieron demasiados año, pero calaron en la memoria colectiva. No, no es de cantera, pero ha sido un gran ejemplo. Merece salir con un gran aplauso porque ha cumplido como un jabato.