Ellos tienen que aportar los goles
Son dos tipos peculiares, diferentes. Conjugan la anarquía del delantero exótico con una forma de ser jovial, pero que en el fondo tienen como fundamento de vida el fútbol, el gol. Ellos son así, y no se esconden. Costa sabe que éste puede ser su gran año. Vive la temporada en la que posiblemente confirme su verdadero nivel para, por fin, poder hacerse un hueco de cara al año próximo en el Atlético de Madrid. Ayer nos confirmó su compromiso y ampliación de contrato con los rojiblancos hasta el 2012. Y aseguró no tener nada más firmado con el Valladolid que el contrato de cesión correspondiente a la actual temporada. Tras lo dicho por el club, ¿alguien lo entiende? ¿Cómo puede ser jugador en propiedad del Valladolid Diego Costa si ni siquiera tiene firmado contrato con los pucelanos para la próxima temporada y sí con los colchoneros?
Y el que seguirá en Zorrilla con seguridad es Manucho. Es la alegría personificada. Sólo un tipo como él es capaz de saltar a un campo desde el banquillo haciendo el avión. Lucha por tener más minutos, piensan tanto él como Diego Costa que pueden llegar a jugar juntos, buscando un mayor rendimiento ofensivo del equipo. Ellos dos y Nivaldo forman grupo fuera del terreno de juego. Dentro, tanto Diego como Manucho van a llevar el peso específico de tener que hacer los goles de la permanencia. Es de desear que su rendimiento vaya a más y que su extrovertida forma de ser repercuta en el bien del equipo.