El domingo cumplió 54 años con un rictus amargo. La derrota ante el ciclón sevillista ponía en la diana a su gran apuesta personal, Pellegrini, y los palos al chileno los ha asumido como suyos propios. En el Foro Ferrándiz-AS vimos un Valdano sereno, reflexivo y cautivador. Te cuente como te cuente el cuento, lo cuenta de lujo. Por eso Florentino sufrió lo indecible cuando se presentó sin él a la reelección de 2004. Sin su verbo fluido, explicar la falta de títulos y la decadencia de los primeros Galácticos resultó misión imposible. Ayer le bastaron dos brochazos ingeniosos para convencernos de que Pellegrini merece tiempo y confianza. Pero lo que más me gustó es su defensa de Raúl. No dijo que el capitán tenga que jugar por ser quién es, pero enfatizó que el Madrid es "con Raúl".

Su temple es necesario en una sociedad empeñada en autodestruirse sin necesidad. El madridismo es un gigantesco Tendido del 7 y Valdano no es ajeno a ese debate permanente que llega hasta los servicios del Bernabéu. Pero se nota que es su quinta etapa en el club y ya se las sabe todas. No obstante, me saco a mí mismo tarjeta amarilla porque quedaron varias cuestiones en el aire. Debimos sacarle qué piensa de la falta de centrocampistas jugones en esta plantilla (sólo Xabi Alonso y Guti son creadores), del roce de parvulario que tuvieron Casillas y Guti en el Pizjuán, y por qué Albiol no rota dejando sin argumentos el asunto del mes. Jorge tiene respuesta para todo. Seguro.