Hasta la fecha, el Madrid ha disputado seis amistosos de pretemporada. Ha tenido rivales exóticos (Al Ittihad de Arabia Saudí y LDUQ de Ecuador), de la MLS norteamericana (Toronto FC y DC United), con rancio sabor irlandés (Shamrock Rovers) y sólo un miura con las puntas afiladas (Juventus). Cuatro victorias, un empate y una sola derrota: ante el único enemigo realmente con pedigrí (¡Del Piero otra vez!). Por eso me motiva mucho el partidillo de mañana en Anoeta. Será el primer rival español, y único, de este verano de caras nuevas e ilusiones renovadas. El Centenario de la histórica Real Sociedad y la presencia de Xabi Alonso en su antigua casa añaden alicientes a una cita futbolera cien por cien. Si yo tuviera una entrada me iba mañana de cabeza a San Sebastián

A los jóvenes habrá que explicarles que los partidos con los donostiarras tienen un sabor especial. Aunque eventualmente esté ahora en Segunda, la Real ha sido un clásico que ha mantenido con el Madrid pugilatos memorables en los años 80 (le arrebató las Ligas de 1981 y 1982, con un Arconada de ciencia ficción) y en la primera etapa galáctica con Florentino (los blancos cantaron el alirón de 2003 en la última jornada, para desilusión de la Real de ¡Xabi Alonso!). No olvido que la mayor goleada del Madrid en Liga fue a una Real recién ascendida en 1967, con un hat-trick de Velázquez (acabaron 9-1). También el Castilla les eliminó en la Copa de 1980. Cómo olvidar los partidos eléctricos del viejo Atocha. Lástima que falte mañana un jabato como Ramos. Le echo de menos