Con Forlán y el Kun nada es imposible
Este es el Atlético, un equipo con dos fenómenos en ataque, el Kun y Forlán, tanto monta, monta tanto. Un equipo que sólo sabe jugar en el filo de la navaja, cambiando golpes. Tiene mandíbula de cristal en la defensa, pero dinamita en los cuatro fantásticos de la delantera. Si te subes en el tobogán de este Atlético caótico y desordenado ya sabes que tendrás que sufrir en todos los vaivenes del juego y que te llevarán del cielo al infierno en el tiempo que tarda el balón en viajar de un área a otra.Te querrás esconder debajo de la mesa cada vez que a los defensas rojiblancos les da por controlar el balón, regatear al borde del área o tirar el fuera de juego, pero entrarás en éxtasis cada vez que el Kun baja la pelota del cielo para convertir un melón en un gol de bandera. Este chico es un portento, un futbolista de dibujos animados que nada tiene que envidiar al gran Romario y que tiene cosas de su suegro Maradona.
Si Kun es grande, Forlán está a su altura. ¡Qué partidazo se marcó ante el Barça! Arriba y abajo, más rápido que nadie. Abrió el marcador con un chutazo que se comió Valdés, marcó de penalti el tercero y fue fundamental en este espléndido Atleti, que nunca bajó los brazos, ni con 0-1, ni con 0-2 ni con 2-3 Fue un partido grande, un Atleti-Barça de los viejos tiempos, con los dos equipos disparando a quemarropa, con fallos garrafales y golazos magníficos. Y con dos maravillosos futbolistas, Kun y Forlán, que anoche tutearon y tumbaron al Barça de la galaxia.