Cazorla y Capel, como Cesc y Xabi

Los equilibrios preocupan a Del Bosque. El seleccionador tratará de impedir que el ambiente del equipo se quiebre y no dudará en repartir minutos entre sus jugadores. Básicamente porque está convencido de que todos son lo bastante buenos para jugar. Capel fue el titular ante Bosnia y Cazorla su relevo. Pero ante Armenia podría ser justo al revés. Del Bosque cubriría así esa cuota de igualdad que garantiza tranquilidad en la Selección. Lo mismo vale para Xabi Alonso y Cesc Fábregas. Entre los cuatro siempre habrá alternancias. Porque cada cambio que hace Del Bosque busca tanto la efectividad como el equilibrio del ecosistema.

Ante Armenia, sobre el papel, se le puede presentar la primera situación conflictiva. Si el partido se pone de cara como cabe suponer por la situación de Armenia, selección número 98 del ránking FIFA (Bosnia es la número 75) es posible que el público, como hizo la gente en La Nueva Condomina, vuelva a pedir la presencia de Bojan. Y eso es peligroso para el ecosistema. Porque Güiza tiene más jerarquía. Del Bosque tendría que elegir entre preservar el equilibrio del vestuario o el de la grada. Y en tales situaciones suele actuar como el Rey Salomón: los dos y punto.