Me tienen asombrado en el Atlético. A los fichajes de Ujfalusi y Heitinga, ahora está a punto de cerrarse el de Oliveira, y me siguen gustando los nombres. Parece que los tiempos de carteles de medio pelo han pasado a mejor vida. El delantero brasileño ha demostrado en el Betis, Milán y Zaragoza que tiene olfato goleador y en especial esa punta de velocidad, que sería el complemento ideal para las características de Agüero y Forlán. Ahora falta por conocer si acepta de buen agrado que se tendrá que turnar con los que se han ganado la titularidad el año pasado. Aguirre no puede repetir los problemas de Maniche, Reyes y Zé Castro, que al final siempre son contraproducentes para la plantilla. El enemigo no puede estar siempre en casa.

Falta la guinda de la cabeza pensante en el centro del campo. La estructura perfecta y no se puede ir todo el proyecto al garete por la ausencia de un arquitecto como sucedió el año pasado. Cerezo y Gil Marín deben sacar euros de la chistera para que el elegido para esta posición tenga calidad, prestigio y personalidad en el césped. Hasta pasaríamos a ser uno de los favoritos para luchar por los títulos. La carencia de un segundo portero me preocupa menos ya que Leo Franco y De Gea son una pareja más que aceptable. García Pitarch parece que este verano está llevando las negociaciones con mayor acierto. Su puerta grande sería poder sacar todo el material que sobra y que es mucho. La primera impresión de este equipo es más que apetecible.