Nadie puede dudar de él. Trabajo, dedicación, amor a unos colores. No es malagueño, pero sí malaguista. El técnico del Málaga, Juan Ramón Muñiz, podría abandonar el club blanquiazul al final de la presente temporada. Dicen que tiene una oferta del Racing de Santander. Por este motivo y otros, sobre todo porque desencadenan su elevada irritación con la manera de jugar del equipo o por los cambios que realiza durante el partido, hay algunos en esta bendita tierra que son muy críticos con su figura. En el caso de que se vaya al conjunto cántabro habrá que entenderlo, pero a buen seguro que antes hará su trabajo o lo intentará, que no es otro que subir al Málaga a Primera.

Si se va, creo que sí, por muchas circunstancias, todos nos acordaremos de él. Hay muchos jugadores de la plantilla malaguista que destacan su capacidad y que le echarán de menos. Los dirigentes del Málaga encontraron en Marbella un chollo muy barato que ha pasado por multitud de actuaciones dentro del club. Si un día le diera por hablar o escribir, el libro se agotaría como si fuera uno de gran literatura similar a los de Arturo Pérez Reverte. El Málaga es un sentimiento. Volveré.