El sitio de Diarra en la boda

El sitio de Diarra en la boda

Sé perfectamente que, cuando haces una referencia religiosa en España, rápidamente te ponen una etiqueta difícil de quitar. Voy a arriesgarme, ya que la primera reflexión (que suele ser la mejor) que me viene a la cabeza leyendo las palabras de Diarra está totalmente inspirada en el Evangelio.

Dice Jesús en una bonita parábola (Lucas 14, 8-9): "Cuando seas convidado por alguien a una boda, no te pongas en el primer puesto, no sea que haya sido convidado por él otro más distinguido que tú, y viniendo el que os convidó a ti y a él, te diga: 'Deja el sitio a éste', y entonces vayas a ocupar avergonzado el último puesto". Significa simplemente que, en la vida como en el deporte, uno tiene que saber cuál es su sitio verdadero. Mahamadou Diarra se siente a gusto en el Real Madrid, a pesar de que le molaría un papel un poco más ofensivo, porque conoce el lugar que le han reservado. Tanto Capello como Schuster le dijeron que no podía cruzar el medio del campo. Y Mahamadou lo aceptó, con humildad.