El Tenerife está en una encrucijada

No es el Tenerife un equipo fácil. Los que conocen el club chicharrero saben que la atención de los medios de comunicación insulares es máxima y la necesidad de información diaria también. Si el equipo rinde, pronto se cae en la euforia y si los resultados no son los esperados se impone el catastrofismo. Algo de eso ha habido en la última semana. Cuando la secretaría técnica le entregó el equipo a José Luis Oltra la idea era empezar de cero y apuntalar bien la plantilla con refuerzos muy contrastados que mejoraran cada línea. Juan Pablo fue el elegido en la portería tras su consolidación en el Numancia. El veterano Juanma debía aportar su experiencia a la zaga. Manuel Martínez y Longás serían los jugadores complementarios en la medular mientras que Nino y Arruabarrena asumían ser los goleadores del equipo.

Todo esto ha funcionado a medias siendo preocupante la incapacidad para ganar los partidos fuera de casa. El último mes y medio no ha sido bueno. El conjunto de Oltra sólo ha logrado vencer en uno de sus últimos seis partidos y la derrota en el Heliodoro Rodríguez López ante el Numancia ha servido como toque de atención. Con un calendario aterrador por delante hace falta realmente un cambio a mejor o los nervios empezarán a aflorar.