¿Quién pone el cascabel al gato?
Florentino predicaba su credo "desde la normalidad". Y mira por dónde, el baloncesto blanco, sección vilipendiada durante el mandato de Pérez (sus visitas a Vistalegre se cuentan con los dedos de una mano y sobran la mitad), arrolla esta temporada con una filosofía vertebrada sobre "la normalidad". Trece encuentros después, Joan Plaza y sus chicos siguen imbatidos en ACB. La receta, además de una cantidad ingente de trabajo, es darle el violín a los virtuosos. En este equipo hay gente que carga el piano y gente que lo toca. Y en ambos casos, Plaza ha sabido obtener el máximo rendimiento de ellos. Ni siquiera los dimes y diretes en la planta noble de la sección han logrado distraer la atención del equipo, que no suele mirar más allá del próximo partido. Carpediem.
Restan cuatro jornadas para el final de la primera vuelta y toma cuerpo la opción de que el Real Madrid llegue invicto al ecuador de la temporada. Para empezar, Papa Noel le trae un regalo anticipado en forma de visita al Akasvayu el sábado 23 de diciembre. Una buena piedra de toque. La pizarra de Pesic calibrará el calado de Plaza. Si lo supera, el 30 le espera el Pamesa en Valencia. Envite complicado. Los Reyes Magos tampoco se quedan atrás: el DKV visitará Vistalegre el 6 de enero. Y si Plaza supera el entuerto que le plantee su admirado Aíto, ya sólo le restará ir el Buesa Arena el 13 de enero para medirse al Tau Vitoria. De momento, ya es cabeza de serie en Copa del Rey. La pregunta que surge ahora es: ¿Quién será capaz de poner el cascabel al gato?