Hayden aún no ha convencido

Hayden recuperó para EE UU la corona en la categoría reina de las motos. En este sentido, prolonga la línea de los grandes pilotos estadounidenses, quienes desde 1978 dominan el palmarés con quince victorias por siete de los italianos, seis de los australianos y una nuestra, la de Crivillé. Ahora habrá que ver si su reinado será tan efímero como el de Roberts hijo o logrará extenderlo como hicieron Roberts padre, Spencer, Lawson o Rainey. Hayden es un piloto que realmente va a más, pero la impresión que ha dejado su victoria abre las puertas a un sucesor. Con la mejor moto posible ha ganado menos carreras que Rossi, Capirossi y Melandri, y tantas como su compañero de equipo Pedrosa, debutante en la categoría.

Esto no dice mucho en su favor. Hasta hace bien poco, y hablo de la pasada temporada, le veíamos en las carreras quedar por detrás de Biaggi (seis veces), de Edwards (cuatro), de Checa y de Barros (tres), de Hopkins (dos), incluso de Jacque y de Goorbergh, clasificados en el Mundial 2005 en los puestos 17º y 20º, respectivamente. De ser un corredor marginal pasó, mediada la temporada, a seguir la estela de Rossi y de Melandri. Este año mantuvo esa regularidad y ha terminado campeón. Campeón, quizá, por llevar la mejor Honda, la Honda a la que renunció Rossi porque se aburría de ganar, la Honda a la cual Pedrosa ya se habrá hecho el próximo año. Será entonces cuando podremos conocer la auténtica consistencia del nuevo campeón.