Las aguas vuelven a su cauce

Tras la tempestad llega la calma y las aguas vuelven a su cauce en nuestro Cádiz una vez celebrados los partidos de Alicante y el de la pasada jornada ante el Deportivo Alavés. Hasta los más duros detractores de Oli, que los sigue teniendo vendan la película que vendan, se posicionan cautos sin duda a la espera de que un par de malos resultados sirvan para sacar las lanzas de nuevo y emprender una batalla que nunca se sabe en esto del fútbol en qué puede terminar. Sin embargo, insisto, la tranquilidad parece en principio que predomina en el viaje de esta tarde -tren hasta Albacete- para la disputa del partido de mañana en el Carlos Belmonte frente al equipo de Carlos Ferrando. Será este un partido donde los gaditanos deberán confirmar la mejoría de las últimas jornadas y donde Chico, el canterano que en principio sustituirá al sancionado De Quintana, buscará confirmar sobre el césped todo lo bueno que es como futbolista.

El encuentro de mañana servirá también para comprobar -imagino que tendrá minutos- la evolución de Javi Acuña tras la lesión y la reafirmación del daño que puede causar Sesma actuando por la banda derecha del ataque amarillo. Por otra parte, y teniendo muy presente el potencial y objetivo del conjunto manchego, será inevitable ver realmente la diferencia -si es que realmente la hubiera- entre dos conjuntos que están llamados a pelear por hacerse un hueco entre los grandes del fútbol español la próxima temporada.