La fiesta madrileña del tenis

Pues ya está aquí el Masters Series de Madrid. Con sólo cuatro ediciones celebradas anteriormente, se ha convertido en todo un acontecimiento. Pero no en un acontecimiento más de los muchos que tiene Madrid, sino en uno de los gordos, de esos que todo el mundo te anda llamando para ver si les consigues alguna entrada. Eso, en la ciudad, sucede con algún partido del Madrid y... pues no me sale nada más. En este sentido, el Masters Series me recuerda a la feria taurina de San Isidro. Los aficionados que acuden se cuentan por miles, pero también son miles quienes asisten para dejarse ver por Las Ventas. El caso es que entre unos y otros hay tiros por las entradas. Y el día de un cartel rematado no se consiguen ni pagando fortunas.

Pues el Masters Series 2006 presenta más carteles rematados que nunca. Para empezar aparecen Nadal y Federer, que son como El Cid y Ponce en los toros. Y después, los siguientes en el escalafón. Esta vez no hay espantadas. Nadal está encantado de jugar en Madrid, porque en ninguna otra ciudad del mundo puede encontrar tanto apoyo, aunque sólo sea por una cuestión de aforo; Federer llega picado, porque mira que ha ganado torneos, pero jamás el de Madrid, donde ha sido eliminado dos veces; tras ellos, la legión de grandísimos tenistas, dispuestos a cortar ellos también las dos orejas. Aunque difícil lo tienen. La puerta grande del Arena sólo la han abierto números uno: Agassi, Ferrero, Safin y Nadal. ¡Como para que gane un cualquiera!