Hacen falta los goles de Kezman

Fue un fogonazo: Ibagaza-Torres- Kezman y gol. El Atlético resolvió el partido con una conexión perfecta de sus cracks, los viejos cronistas dirían que con una jugada de tiralíneas. Cuando se juntan los grandes futbolistas pasan esas cosas. Ese tendría que ser el camino y no el juego deslavazado y otra vez anárquico que ayer ofreció el Atlético, con cada uno en su guerra particular. No funcionó el equipo como frente al Barça, se atascó el Atlético, otra vez con los plomos fundidos en muchas fases del partido. Y sufrió demasiado. Hace unos meses la Real se habría llevado los tres puntos del Calderón hasta con cierta facilidad, pero con Pepe Murcia las cosas están cambiando y se nota en que este Atlético es capaz de ganar los partidos hasta jugando mal, como ayer.

Kezman volvía después de una sanción y su cabezazo sirvió para que siga la racha de victorias, pero el serbio todavía está lejos de ser el crack que se esperaba cuando llegó este verano. Hasta ahora, ha tenido sólo algunas apariciones esplendorosas en el Atlético, como ayer, y poco más. Lleva sólo cinco goles como rojiblanco, un escaso bagaje. Este es un futbolista al que hay que exigir mucho más. Su aportación es imprescindible ahora que el Atlético empieza a mirar hacia arriba en la clasificación. Para seguir avanzando, el serbio tiene que aparecer mucho más. Él y Torres, por sus condiciones, deberían formar una pareja temible. Esperemos que el fogonazo del gol sea el comienzo de esa sociedad. El Atlético la está necesitando.