No más retales, por favor
Más que un derby que no interesa a nadie, como aficionado me inquieta sobremanera saber de qué manera vamos a ser capaces de construir un bloque competitivo. Me asaltan muchas dudas porque el fracaso, sin paliativos, de no estar en Europa merma, más si cabe, nuestras exiguas posibilidades económicas. El problema no lo vamos a resolver con un fichaje de relumbrón, ni con un puñado de retales como se ha hecho hasta ahora. La renovación de la plantilla debería ser profunda. El director técnico deberá hilar muy fino, ante un reto tan importante que tiene que afrontar con recursos más bien limitados. Perlas como Perea no creo que abunden en el mercado, pero habrá que buscarlas.
Lo fácil es caer en el error ya consabido, fichar a jugadores baratos y de segunda fila que ya sabemos el resultado que dan. Rentabilizar la marcha de una parte importante de la plantilla, a pesar de su ganada devaluación, puede ayudar a la consecución de fichajes solventes. Este no ha sido nunca un equipo de Musampas o Sosas. Jamás hemos congeniado con la mediocridad que nos impone un destino adverso desde hace tiempo. Ya esta bien que ni el banquillo, ni la plantilla estén ocupados por técnicos y jugadores que no tienen la categoría suficiente para defender unos colores que hace mucho, entre unos y otros, han terminado por desteñir.