Los onces de César Ferrando

Qué alineación veremos ante el Numancia en Copa? ¿Qué sistema táctico? ¿Será un 4-4-2, un 3-5-2 o tal vez un 4-2-3-1? Quién sabe, a lo mejor César Ferrando nos sorprende con uno nuevo. No hace falta saber mucho para entender que con tanta variación táctica es imposible forjar un bloque compacto. La consecuencia más lógica de tanta improvisación, ya la conocemos: falta de conexión entre líneas, juego deshilvanado y deslucido. Por mucha polivalencia que tenga el jugador, tanto cambio posicional tiene que mermar su fuerza, su ánimo y sus potencialidades.

N o comprendo por qué a Gronkjaer, si es un jugador para la banda izquierda, se le alinea por la derecha. Tampoco sé por qué Ibagaza se ha pasado toda la temporada ubicado en un lugar que no es el suyo. Por no hablar del cambalache en el que se ha convertido el centro del campo. A veces la apuesta definitiva parece ser Sosa, otras Luccin y cuando creemos que el doble pivote está asentado, surge Colsa como más fiable. Seguramente esté equivocado, pero cambiar permanentemente el once en virtud de las características del rival, puede estar incidiendo negativamente en el rendimiento. Cierto es que cada encuentro exige un enfoque diferente, pero de ahí a inventar prácticamente un equipo cada jornada me parece algo contraproducente y desproporcionado.