Nos temen y están preocupados

Están preocupados. París, Londres, Nueva York y Moscú se han dado cuenta de que vamos en serio. Lo nuestro no es un farol, es una realidad. Los miembros del COI percibieron que Madrid está capacitada para organizar los Juegos, que tiene el apoyo popular y que cuenta con el respaldo de todas las instituciones. Estas tres premisas, que parecen obvias y necesarias para celebrar un gran evento, no pueden apuntárselas las otras candidatas rivales. En algunos casos el gobierno no las apoya, en otros el pueblo pasa, y en otros sus infraestructuras son deficientes. La candidatura de Madrid no son ni papeles ni maquetas; son realidades. El 75% de las instalaciones ya están construidas.

La concentración de competiciones deportivas es una realidad, y la infraestructura hotelera ya está firmada con el respaldo de los empresarios del sector. Nos temen. Por eso, Londres cuenta el chiste del regalo a los miembros del COI por parte de los mandatarios del Madrid; por eso, París envió periodistas que preguntaron con mala baba a los miembros de la Comisión, y por eso el alcalde de Nueva York ha anunciado una campaña publicitaria de promoción salvaje para intentar igualar la desventaja que ahora tiene la ciudad americana. Tenemos que seguir trabajando, organizando unos buenos Europeos de Atletismo, y bordando los Juegos Mediterráneos.

Los lobbies de influencia tienen que seguir batallando entre bastidores porque nuestro mensaje, que ya ha calado en el mundo, necesitamos que lo perciban claramente los miembros del COI que van a decidir con sus votos quién gana el premio.