Buenas vibraciones

Ferrando llega al Calderón con grandes ambiciones. Quiere un Atlético entre los mejores, osado y ofensivo. Toda una declaración de principios. El técnico, antes de ponerse a trabajar con el equipo, emite buenas vibraciones y eso es importante. Da la impresión de que Ferrando considera que ésta es su gran oportunidad. Después del gran trabajo que ha realizado en un modesto como el Albacete, ahora quiere pasar la reválida en un equipo que aspira a todo, como él mismo se encarga de señalar. Ferrando se presenta con la maleta cargada de ilusiones ante la aventura en la que se ha metido, aunque sea consciente de que el banquillo rojiblanco ha sido en numerosas ocasiones más una silla eléctrica que un trampolín.

Pero para que el proyecto Atlético acabe de ilusionar a los aficionados, hará falta que en las próximas semanas los hechos vayan sustituyendo a las palabras. Y los hechos son fichajes concretos y nombres que permitan al Atlético dar el salto adelante que todo el mundo espera y que no se consiguió la temporada pasada, porque el plan Manzano se quedó al final en terreno de nadie, fue un quiero y no puedo. Confiamos en que con Ferrando no tengamos más de lo mismo. Y para eso hará falta que de verdad lleguen cracks. Quizá la prueba del nueve del futuro del Atlético sea la operación Etoo. El camerunés sí que le daría credibilidad a este proyecto que encabeza Ferrando.