Red Bull se indigna ante las “acusaciones difamatorias”

La resaca de las informaciones que vinculan a Red Bull con una infracción en el techo de gasto de 2021 la protagonizó Christian Horner, máximo responsable de la escudería de Milton Keynes, en la rueda de prensa de la FIA. El británico fue crítico con las acusaciones que vertieron Ferrari o Mercedes sobre Red Bull, porque asegura que los documentos que auditan el tope presupuestario “son confidenciales” y aún están en fase de desarrollo. “Es un envío de datos privado entre el equipo y la FIA, ¿cómo es posible que otro equipo pueda saber si hay una infracción cuando ni siquiera lo sabremos nosotros hasta la semana que viene?”. El gasto de los equipos tiene un máximo legal desde 2021 de 145 millones de dólares.

“Cuando se hacen esta clase de acusaciones, los que viven en una casa de cristal no deberían ponerse a lanzar piedras. Nos tomamos muy en serio los comentarios que se han hecho y no parece casual que coincida con la primera oportunidad de Max (Verstappen) para ganar el título. No hablamos ya de sus enormes actuaciones, sino del techo de gasto. Es una táctica para no hablar quizás de la falta de prestaciones en la pista (de los rivales)”, zanjó Horner.

En el paddock se habla de un exceso de gasto inferior a los 7,5 millones de dólares. Mekies, segundo de Ferrari, respondió qué puede hacer su fábrica con ese dinero: “En un cálculo sencillo, entre cinco y diez millones son unos 70 ingenieros que te darán una cantidad importante de tiempo por vuelta. Las reglas financieras se vinculan a las técnicas y deportivas al mismo tiempo. Por eso queremos un enfoque transparente y severo”. La FIA, mientras tanto, lamenta la “especulación” sobre el tema y espera a concluir su informe con los presupuestos de todas las escuderías antes de presentar infracciones ante un tribunal específico.