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MOTOGP | PORTUGAL

Quartararo aprieta a Yamaha

Mensaje del campeón a su fábrica: "Suena ridículo: campeón del mundo el año pasado y contento con terminar séptimo en Austin. Necesitamos tener cosas nuevas".

Fabio Quartararo.
motogp.com

Yamaha está en horas bajas por culpa de una M1 que corre menos que la competencia. Sin embargo, cuenta en sus fila con Fabio Quartararo, el vigente campeón del mundo que hace lo que puede y que no se corta a la hora de apretar a Yamaha cuando comparece antes los medios de comunicación. A su llegada a Portimao ha enviado un mensaje claro a la fábrica de los diapasones sobre la importancia de mejorar su moto, y no le falta razón...

Al comentarle que desde Yamaha habían asegurado que llegaría material nuevo con la llegada del Mundial a Europa, el francés dice con contundencia: "Espero. De momento no tengo demasiadas noticias sobre esto. Tenemos que tenerlas porque, imagina, estaba contento con el séptimo puesto de Austin… Suena ridículo: campeón del mundo el año pasado y contento con terminar en esa posición en Austin. Necesitamos tener cosas nuevas".

Así son los problemas del campeón cuando pelea con sus rivales: "Todavía estoy impresionado de ir quinto en la clasificación (a 17 puntos de Bastianini), porque he hecho un podio, y luego noveno, octavo, séptimo y no estoy tan lejos después de cuatro carreras. Con Argentina y Austin siendo muy duras. Si te fijas en el ritmo, soy siempre rápido, porque ruedo solo, nadie está peleando conmigo… pero en cuanto me adelantan en la recta, me bloquean, no puedo hacer mi ritmo. Con el único que más o menos pude hacerlo fue con Marc, porque él frena muy, muy tarde, y podía mantener más tiempo mi ritmo. Pero en cuanto tengo a alguien delante, como en Argentina… Todos trazan un poco en forma de V, y si nosotros no podemos hacer el paso por curva, más redondo, somos lentos. Veremos a ver cómo nos va en este circuito".

Para la cita de Portimao, donde ganó en abril del año pasado, es más optimista: "Este circuito en principio no nos va mal. En la primera carrera del año pasado estuve en el top cuatro en el inicio de la carrera y pude adelantar, pero en la segunda carrera me quedé detrás de las Ducati y no pude hacer mi ritmo y fue un desastre. Así que todo va a depender mucho de nuestro entrenamiento oficial y de cómo evolucione la carrera". La Q2 se le antoja vital: "Mi plan en los oficiales es empujar lo más que pueda. No puedo tener mejor plan que este, buscar el límite. En Austin di todo lo que tenía y cometí un error, pero es la única manera en la que puedo retar a las demás marcas. Para mí en Indonesia el asfalto estaba mejor para nosotros, y simplemente busqué ese límite y conseguí mi objetivo, que es muy duro, porque todas las fábricas han dado un gran paso. No es que ahora yo sea peor en los oficiales, si no que tengo que ir al límite".

Pese a las dificultades en estas primeras cuatro carreras, Quartararo mantiene la fe en sus posibilidades de revalidar título: "Este gran premio es un poco 50%-50% para nosotros, pero es cierto que tanto Jerez como Le Mans son muy importantes para nosotros y no nos podemos permitir fallar. Si queremos luchar por el campeonato los errores no están permitidos. Tenemos que estar en el podio, porque si no será muy difícil llegar en buenas condiciones al final de la temporada".

Ganan todos, pierden todos. Son un equipo y, de momento, Quartararo está por encima de Yamaha. Así lo siente él, aunque no lo diga: "Siendo sincero, sobre todo en la pasada carrera sentí que estaba pilotando a mi mejor nivel. Y creo que cuando tienes este tipo de problemas, cuando la moto digamos que no va bien, porque esa es mi sensación, intentas sacar lo mejor de ti mismo. En las primeras tres carreras estaba muy frustrado por la velocidad, y en Austin me dije: ‘esto es lo que tenemos, no podemos hacer nada así que me tengo que concentrar en pilotar’. Y pude hacer algunos buenos movimientos. Normalmente no es que tenga miedo, pero no me lanzo a por ello, y en Austin en cada pequeña ocasión que tenía me lanzaba. Y tengo la sensación de que en los momentos duros es cuando aprendes más. Cuando ganas mucho todo va bien, pero cuando logras resultados como el de Austin y te cuesta conseguirlo, es cuando aprendes más".