Álex Márquez: "Al 2022 le pido que Marc pueda ganar el título"
Tras los test de Jerez, el español ya habla de una nueva etapa "ilusionante" para Honda después de "tocar techo": "No se puede comparar una moto a otra".
Con las botas de trabajo manchadas de barro por una mañana como profesor, Álex Márquez atiende en una entrevista a AS en la presentación de la sexta edición del Allianz Junior Motor Camp en el circuito de Rufea (Lleida). Con un Marc ausente desde la pasada cita en Portimao, el piloto del LCR Honda muestra una actitud mucho más positiva, ya disfrutando de sus vacaciones, pero sobre todo con la ilusión de un nuevo comienzo en Honda. Dice que la dirección es, por fin, la correcta y que, con un nuevo proyecto que parte desde cero, la marca del 'ala dorada' vive con esperanzas de remontar en 2022 dos años para el olvido. Y él, en su tercer año, continúa pidiendo regularidad como objetivo principal.
- En Valencia dijo que el test de Jerez era clave, pero ahora ya habla de ilusión. Deja buen sabor de boca para 2022...
- Muy buen sabor de boca. Cuando pruebas una moto nueva es muy diferente, el concepto es totalmente distinto ya en términos de set up. Todavía se tienen que trabajar mil cosas, como piloto también sacarle más partido, pero los tiempos llegaban y eso es lo más importante. Es ilusionante, porque es una moto muy diferente y te da aire nuevo. Solo llevo dos años en MotoGP, pero la misma moto casi de un año a otro. También es ilusionante porque Honda ha hecho un gran trabajo donde hay que seguir, no pararse aquí. Hay que evolucionar muchísimo, pero la base es muy buena.
- El nuevo prototipo lo probó por primera vez en Jerez. Dice que los comentarios coinciden con Pol Espargaró y Takaaki Nakagami. Su hermano, Marc, la probó en Misano, ¿coincide también con él?
- Marc y yo a veces probamos cosas en los test, que no puedes hablar ni nada, y coincidimos casi en todo. Al final he crecido viendo sus test. El transmitirle a los ingenieros lo que quiero y lo que no es muy parecido a él. Vengo de esa escuela, de Emilio (Alzamora, manager de ambos hermanos), de Monlau, de saber ser ordenados o saber cómo hablar con ellos. En muchos o en casi todos los comentarios coincidimos. A veces ha pasado que Marc y yo estamos de acuerdo en algo mientras Pol y Nakagami lo veían de otra manera. Con Marc siempre hacemos comentarios muy parecidos y, esta vez, fue exacto. No había hablado con él y Santi (Hernández), que estaba en Jerez, me decía que era exactamente lo que decía Marc. Es algo que también me da tranquilidad, saber que vas por el buen camino. No es que te vayas por las ramas y vuelvas. Es importante que todos coincidamos y Honda sepa cuál es la prioridad para este invierno.
- Se puede decir que el camino al que os recondujo Marc sigue en la línea y que para 2022 se puede esperar mucho más de Honda.
- Sí, sí, eso es lo importante. Lo que hay que proyectar más en invierno es el motor y la aerodinámica, que es lo que está más limitado durante el año, donde hay que trabajar más. Luego, durante la temporada, se pueden probar chasis, set up... se pueden probar mil cosas. Ahora el trabajo con el motor y la aerodinámica será clave para Malasia. Pero también en todas las facetas. Al final es una moto nueva, joven, donde hay que entender muchas cosas para mejorar.
- Especialmente el concepto de moto, el reparto de peso... No se puede comparar una a otra. Con la anterior hacía muchos años que Honda estaba trabajando, dio mucho potencial, pero se había tocado techo porque las otras marcas se fueron por otra dirección. Sobre todo lo que cambia es el chasis. Hemos ganado mucha tracción, que es lo que Pol y Marc dijeron en Misano, donde hemos mejorado más, pero vienen otros problemas. Nuestra moto era muy ágil y lo hemos perdido un poco, pero es algo normal. No en todo seremos buenos, pero el tener la tracción y la aceleración es algo clave ahora en MotoGP.
- Viendo el final de temporada y cómo han ido los test de Jerez... ¿es Ducati la moto perfecta?
- Es la moto más completa, pero creo que desde hace ya unos años. Es la moto que muchos pilotos la pueden llevar bien, casi todos son rápidos. Es algo que se ve en resultados y es fácil verlo desde fuera. Al final también son épocas. Honda también tuvo la suya, de 2009 a 2014, que ganaban casi cada año y eran muy competitivos con Pedrosa, Stoner o Marc. Ellos apostaron por ese concepto de moto mucho antes y han evolucionado muchísimo. Ahora, tal y como está de igualado, Ducati ha marcado la diferencia, pero el año que viene puede estar aún mucho más igualado.
- De un año de aprendizaje y transición, ¿qué te llevas del 2021?
- De los malos momentos también se aprende mucho y se aprende a ser mucho más completo. Como piloto también te da esa experiencia para que esos problemas no pasen en el futuro o sepas anticiparte a ellos de alguna manera. Sigo evolucionando muchísimo como piloto, entendiendo mucho más la electrónica o los neumáticos. Los problemas que hemos tenido te hacen que, como piloto, intentes de alguna manera suplirlos y es algo que me ha ayudado.
- ¿Te quedas con el Álex de 2020 por los podios o el de 2021 por el aprendizaje?
- Con el del 2021. Cada año aprendo y como piloto me siento mucho más completo que en 2020. Ahora pienso en los podios y no sé como salieron (risas). Me siento mucho más preparado. Cuando cojo una MotoGP después del invierno me siento mejor. Son esas cosas que te aporta el futuro y que cada vez vas mejorando más.
- Hace unos días nos visitó Toni Bou y decía que de las victorias casi no se aprende. ¿Puede sacar alguna lección de una victoria o un podio?
- Aprendes, pero diferente. De los momentos más duros es donde aprendes más y sabes dar mucho más valor al ganar. Toni ha ganado demasiado (risas). Seguro que el sabor no es el mismo. El tener un año duro y difícil hace que valores mucho más esos momentos. Mi primer título en Moto3 no lo valoré lo que merecía. El de Moto2 sí, pero porque había pasado una fase difícil hasta llegar otra vez a ganar. Los momentos duros hacen que saborees mucho más los buenos, que le des mucho más valor y lo sepas disfrutar más.
- ¿Da rabia llegar a Honda en los años más difíciles?
- No, no. Creo en el destino y el destino fue que en 2019 gané (el título de Moto2), Jorge Lorenzo, por lo que sea, decidió retirarse y tuve esa oportunidad que cogí. Creo en el destino y fue ese, ya está. Seguro que hay que reconducir la situación de alguna manera, pero creo que hemos acabado en buena forma este final de temporada. De aquí es de donde hay que partir el año que viene, con este potencial y con esta moto nueva que nos ayude.
- ¿Cuál es su deseo para 2022?
- Para mí, el deseo es ser mucho más regular, eso lo primero. Hacer podios es algo que me encantaría. Este año estuvimos cerca en Portimao, pero la bandera roja lo impidió. Este año ha sido un poco la temporada en la que vas por la derecha y te salen por la izquierda, al contrario todo el rato. Cosas que tienen que salir perfectas, por lo que sea, salen al revés. No pido suerte, si no que el destino sea un poco más agradable con nosotros. Unos cambios que hemos hecho en el equipo creo que van a ayudar mucho para el futuro. Que no haya lesiones, que haya salud, sobre todo para Marc, no solo para mí. Espero estar más constante dentro del top 6 o top 8. Y que Marc pueda ganar el Mundial.